PEPE EN DESGRACIA
Esta mañana
me levanté
viendo a mi mujer
haciendo un favor
a nuestro vecino, sólo por amor.
Y después
descubrí
a mi amante más fiel
yéndose por dinero
con una mujer.
Y cuando
llego al trabajo,
un compañero me dice:
el Director te buscaba
para darte una patada.
Y, antes de
morir,
baila este compás
que ha de llevarte bailando
a tu propio funeral.
Le juego al
número 3
pero siempre sale el 4.
Apuesto que gana el líder
y se va todo al carajo.
Me decido, me
decido
a romper el maleficio
y me entrego al continente
que, por negro, nadie ve.
Mi madre me
lo decía:
ten cuidado mi pequeño,
de la mujer y del hombre
y de los vientos de invierno.
Nunca mires
fijamente
a una mujer muy hermosa
porque esas se alimentan
de carroña, de carroña.
Y, antes de
morir,
baila este compás
que ha de llevarte bailando
a tu propio funeral.
Y si algún
alma humana
te llega a molestar,
tú le cantas tranquilo
que has venido al carnaval.
Las flores y
los cánticos
fueron tan bellos
que volvería a morir
en un momento.
Vamos al
cementerio,
que allí vas a encontrar
en cada tumba amable
un amigo sin par.
No preguntará
tu nombre
ni le importan tus medidas,
pero ha de vivir contigo
por toda la eternidad.
Y, antes de
morir,
baila este compás
que ha de llevarte bailando
a tu propio funeral.
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