Al sur de Europa

Miguel Oscar Menassa -2002

 


DESPUÉS NACÍ A LA LIBERTAD

 

Después nací a la libertad y me encadenaron
y así durante cinco siglos me tuvieron,
vivo y encadenado y me dieron algo de comer,
alguna lágrima para llorar por todo lo perdido.

 

Comí esa nada que me daban y lloré esas lágrimas
y me di cuenta que mi libertad medía sólo un eslabón.
Un ruido me separaba de otro ruido, una cadena
me ataba a otra cadena y a hombres como yo.

 

¡Oíd el ruido de rotas cadenas! y nada se escuchaba.

¡Libertad! ¡Libertad! ¡Libertad! y nadie se movía.
Paz y amor nos dijeron y estalló la guerra.

 

Esclavos, exiliados, mutilados, muertos, desaparecidos,
así fuimos teniendo los nombres del dolor y de la rabia.
Así, por el único camino para sobrevivir, fuimos poetas.
 

 

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