De la locura, tendremos que decirlo por fin,
ella es nuestra máscara.
Suprema máscara en las más ambiciosas ceremonias.
Diosa del olvido
dame tus palabras, tu tono mayor
el tono para arrancar una sonrisa del idiota,
el tono de los Andes nevados,
la luz
que enceguezca definitivamente a los ciegos.